¡Humildad y confianza! ¡ Cuánto importa inculcar estas dos virtudes en la dirección de las almas! El privilegio de Teresa del Niño Jesús consistió en haber caminado por esa vía desde el principio. Pero su «caminito» está abierto a todas las almas que, como ella, desean amar a Dios. Toda alma ha recibido igual que ella los dones del Espíritu Santo y goza de su inhabitación divina; teniendo por guía a ese Espíritu de Amor, llegará como Teresa a la cima del Amor. La puerta de este «caminito» abierta a toda alma de buena voluntad es la confianza humilde, la humildad confiada.
de: abandono.com
Son las virtudes que busco acordándome de la Santa.
ResponderEliminarGracias y feliz tarde.