Cada acto de Teresita es el magisterio de Jesus... eso es su vida, su libro!..
Y no una autobiografia. Teresita es la realidad docente y vivencial
que ilumina los oscuros rincones de la vida humana.



viernes, 26 de noviembre de 2010


¿Cómo podemos explicar esta ola de entusiasmo por una monjita con tuberculosis, cuya vida dentro de los muros del convento, se ha caracterizado por nada de extraordinario? ¿No es la simplicidad de su caminito de la confianza y el abandono? "Sin ir más allá del orden común de las cosas", dice el Papa Pío XI, "seguido de ella hacia fuera y cumplir su vocación con tal presteza generosidad, y la constancia de que ella llegó a un grado heroico de las virtudes." El Pontífice ha declarado venerable misma manera que Teresa es "no sólo posible, pero de una manera fácil para todas las almas."

sábado, 20 de noviembre de 2010

¡ANDO POR UN MISIONERO!



Se hallaba enferma Santa Teresita en los últimos días de su vida, agotada por la enfermedad. La enfermera, creyendo que el dar un paseo de un cuarto de hora por el jardín podía aliviarle, le aconsejó que lo hiciera. Este consejo fue para la Santa una orden terminante. Cierta tarde, advirtiendo otra religiosa que Sor Teresita andaba trabajosamente, le dijo: Mejor sería que descanse usted. Su paseo en esas condiciones no le puede hacer ningún provecho. Se fatiga y nada más.

- Es verdad - contestó Santa Teresita -, pero ¿sabe usted lo que me da fuerzas? Pues bien, ¡ando por un misionero! Pienso que allá muy lejos puede haber algún misionero casi agotado de fuerzas en sus excursiones apostólicas y para disminuir sus fatigas ofrezco yo las mías.

sábado, 13 de noviembre de 2010

Teresa del Niño Jesús y La Paciencia


La paciencia perfecciona las obras (St. 1, 4).

¡Qué bien se cumple en Santa Teresa del Niño Jesús esta palabra de Santiago! La paciencia fue un factor importantísimo en su perfección. Su humildad, su confianza y su amor se perfeccionaron en la paciencia.

En este punto, Teresa se amoldó perfectamente al plan de Dios. Es evidente que en el mundo actual, degenerado por el pecado, los castigos que son secuela del mismo tienen la misión no sólo de regenerar y salvar al hombre, sino de contribuir a su máximo perfeccionamiento.

Esto es indudable. Dios ha escogido este mundo, en el orden providencial actual, para que el hombre se santifique a pesar de su miseria, y para ello la paciencia es un medio esencial.

Siendo el sufrimiento consecuencia del pecado (inevitable, por lo tanto, en la vida humana), la clave, el secreto de la perfección consistirá en convertir el tal sufrimiento en medio de unión con Dios; es decir, en motivación de amor. Esta es la misión de la paciencia en el trabajo de la perfección y de la santidad.

Teresa del Niño Jesús lo comprendió y lo vivió maravillosamente. La paciencia es, a sus ojos, el mejor acto de amor; el amor en su forma más frecuente y más auténtica.

domingo, 7 de noviembre de 2010


Teresa del Niño Jesús vivió en grado eminente la verdad de la fe divina que le infunde la seguridad, la certidumbre de ser amada por el Todopoderoso. No concebía ella a Dios sino a la luz de la profunda expresión de San Juan: Dios es caridad (1 Jn. 4, 16). No sin designio especial de Dios, Teresa, huérfana de madre desde su primera infancia, se volcó en la persona de su padre, y adquirió la experiencia, digámoslo así, del amor paterno más tierno y solícito. Nada tiene, pues, de extraño que apenas oyó hablar de Dios, de un Dios Bueno, de un Dios que es «Nuestro Padre», su alma de niña se sintiese naturalmente inclinada a representárselo a imagen de su padre de la tierra. Y procediendo sin saberlo por el método que los teólogos llaman «via excellentiae», aplicó a Dios, superado hasta el extremo, hasta lo infinito, el amor de su padre, su ternura, su solicitud.

fuente: abandono.com

miércoles, 3 de noviembre de 2010



J.M.J.T.

2 de febrero de 1893

EL ROCIO (1) DIVINO
O LA LECHE (2) VIRGINAL


1 Envuelto en luz de amor,
en el blando regazo de tu Madre,
¡oh, mi dulce Jesús!, te muestras a mis ojos,
radiante de amor (3).

El amor:

misteriosa razón que te alejó (4) de tu mansión celeste
y te trajo al destierro.
Deja que yo me esconda bajo el velo (5)
que a la humana mirada te disfraza.
Solamente a tu lado, ¡oh Estrella matutina!,
mi corazón pregusta un avance del cielo.

2 Cuando al nacer de cada nueva aurora
aparecen del sol los rayos de oro,la tierna flor que empieza a abrir su cáliz
espera de lo alto un bálsamo precioso:
la rutilante perla matutina,misteriosa y henchida de frescura,
es la que, produciendo rica savia,hace abrirse a la flor muy lentamente.

3 Tú eres, Jesús, la flor que acaba de entreabrirse,contemplando aquí estoy tu despertar primero.Tú eres, Jesús, la encantadora rosa, el capullito fresco, gracioso y encarnado.Los purísimos brazos de tu Madre querida son para ti tu cuna y trono real. Es tu sol dulce el seno de María,
tu rocío, la leche virginal. 4 Divino Amado y hermanito mío,
columbro en tu mirada tu futuro: ¡pronto a tu Madre dejarás por mí,
pues ya el amor te empuja al sufrimiento!Pero sobre la cruz, ¡oh flor abierta!,
reconozco tu aroma matinal, reconozco las perlas de María:
¡es tu sangre la leche virginal! 5 Este rocío se esconde en el santuario,
hasta el ángel quisiera poder beber de él: al ofrecer a Dios su plegaria sublime,
como san Juan repite: «¡Hele aquí!».

¡Oh sí!, miradle aquí a este Verbo hecho Hostia,
eterno Sacerdote, sacerdotal Cordero. El que es Hijo de Dios es hijo de María...
¡Se ha hecho pan de los ángeles la leche virginal!6 El serafín se nutre de la gloria, del puro amor y del perfecto gozo; yo, pobre y débil niña, sólo veo
en el copón sagrado de la leche el color y la figura.

Mas le leche es un bien para la infancia.
Del corazón divino el amor no halla igual...
¡Oh tierno amor, potencia incalculable!
¡Mi hostia blanca es la leche virginal!



NOTAS POESIA 1
EL ROCÍO DIVINO

Fecha: 2 de febrero de 1893. Compuesta para: sor Teresa de San Agustín.

Con la audacia serena de un niño, y como quien se siente a gusto en el
misterio, Teresa va siguiendo el itinerario de ese «rocío celestial».
Reconoce su «aroma matinal» en la Flor sangrante del Calvario; vuelve a
encontrar su sabor en el Pan de los ángeles», el Cuerpo eucarístico del
Señor, el «Verbo hecho Hostia» después de haberse hecho carne por la
mediación de María. En definitiva, Teresa canta, en su propio tono, y
aunque sea balbuciendo, el mismo Ave verum que santo Tomás de Aquino.

Para quien nunca había compuesto un solo verso era una empresa
temeraria hacer sus primeros pinitos abordando un tema tan difícil. Detrás
de la inexperiencia, especialmente en la continuidad y la apropiación de las
imágenes, se revela la capacidad de la autora para hacernos entrar, a
través de la modalidad poética, en «misterios más ocultos y de un orden superior» (Cta 134).

Sor Teresa de San Agustín ha contado cómo pidió a Teresa esta poesía
(Souvenirs d'une sainte amitié, publicados en VT nº 100, pp. 241-255),
antes de hacerla practicar la caridad de manera heroica al final de su vida(cf Ms C 14rº)...

La lactación del Hijo de Dios por una Madre Virgen es un aspecto de la
Encarnación que ha sido cantado por la Iglesia a través de lo siglos.
Teresa recibió esa tradición de la liturgia y de diversos autores espirituales
(entre otros, a través de El Año Litúrgico de Dom Guéranger). Es también
innegable el influjo de la Vida de sor María de San Pedro, de la que Teresa
de San Agustín era una ferviente lectora.
(1) Esta palabra aparece cincuenta veces en los escritos. Como buena
normanda, Teresa toma en un principio sus imágenes de las riquezas de la
naturaleza (cf Cta 141). El rocío será una metáfora de la Sangre de Jesús
(P 15; RP 2, 8rº), del Bautismo (P 28; RP 2, 6vº), o de la Eucaristía (Cta 240).
(2) Uso más bien escaso: catorce veces (de las cuales siete aquí); Teresa nunca digirió la leche...
(3) «Jesús, ¿quién te ha hecho tan pequeño? El amor» (San Bernardo, citado en Cta 162).
(4) Cf P 8,9, 2+.
(5) Cf P 8,4+.